Plaguicidas.
Los plaguicidas son comúnmente concebidos como las sustancias químicas utilizadas para matar, controlar, o manejar poblaciones de plagas. Esta definición debe ampliarse para adecuarse a nuestra era moderna de rápido cambio en las tecnologías del manejo de plagas. Primero, los plaguicidas no son siempre sustancias químicas en el sentido de nuestra definición tradicional. Algunas preparaciones de bacterias (por ejemplo Bacillos thuringiensis var. Israelensis, o Bti) son utilizados para el control de larvas de mosquito y otras moscas picadores en agua. Incluso existen preparaciones de virus registradas como plaguicidas que matan ciertos insectos; la mayoría por ejemplo provienen de practicas agrícolas o forestales. Estas bacterias y virus no son del todo productos de síntesis química, y son frecuentemente llamados plaguicidas microbiales, o bioplaguicidas.
El plaguicida ideal.
Idealmente, cualquier plaguicida debe tener rápida acción sobre las plagas, también debe ser completamente inofensivo para la gente, animales domésticos, vida silvestre y otros componentes del medio ambiente. Sus residuos deben de perdurar solo lo necesario para lograr el efecto deseado normalmente por periodos muy cortos. Debe ser también económico y accesible en cantidades suficientes, químicamente estable (antes de la aplicación), No inflamable, y seguro para utilizarse en hogares e industrias. Debe ser de fácil preparación y aplicación, no corrosivo, que no manche y que no tenga olor indeseable.
Desafortunadamente, ese tipo de plaguicida no existe, Si este plaguicida fuera accesible, el trabajo de los PMP seria mucho mas fácil. No seria necesario saber como preparar y almacenar los productos químicos, o como usarlos de manera segura, de manera inobjetable para los clientes y conforme a la ley.
Debido a que tal material ideal no esta disponible, por lo tanto se hace necesario que el profesional conozca muchos aspectos acerca de los plaguicidas, las plagas y las situaciones especificas del trabajo. Se deben de tomar grandes cuidados cuando se utilizan plaguicidas. La etiqueta en el envase del plaguicida es siempre una buena fuente de información y la manera apropiada y menos riesgo de utilizar este material.
Los productores y profesionales nunca deben de considerar o decir que un plaguicida es seguro, pero esto no quiere decir que sea inseguro. La correcta aplicación incluso del plaguicida mas dañino — siguiendo las indicaciones en la etiqueta, el sentido común y juzgando correctamente las condiciones — sera de uso seguro. Por tanto, el manejo de plagas y el uso de plaguicidas son tareas de gran responsabilidad que requieren considerar meticulosamente los posibles riesgos y efectos negativos.
Como una profesión, el manejo de plagas es un tema complicado. Las herramientas, reglamentos y aspectos tecnológicos relacionados con esta actividad están cambiando constantemente. La naturaleza técnica y el importante papel del majo de plagas en nuestra sociedad demanda que el PMP este bien entrenado. Este tiene la responsabilidad de mantenerse competente con la educación y el entrenamiento apropiado en todos los aspectos de la tecnología del manejo de plagas. Quizá lo mas importante es prestar atención constante al uso mas seguro posible, o ideal del plaguicida en todos los aspectos del trabajo profesional. O para algunas situaciones — o algunos clientes — el manejo efectivo y seguro de las plagas sin el uso de pesticidas seria el ideal.
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